La discusión en la Cámara de Diputados se extendió por
varias horas. Menem sometió primero a votación el temario,
que previsiblemente no obtuvo los dos tercios para tratarse
sobre tablas. Tuvieron aval los pedidos con día y hora para
apurar ambos temas en Educación y Presupuesto.
Tras
varias horas de fuertes cruces entre diputados, la
oposición en la Cámara baja logró aprobar este martes el
emplazamiento de las comisiones de Educación y de
Presupuesto y Hacienda para que, con día y hora, apuren los
dictámenes de los proyectos relacionados al financiamiento
universitario y la restitución del Fondo Nacional de
Incentivo Docente.
En medio
de reclamos y discusión por cuestiones reglamentarias,
pasadas las 18.30 el presidente del Cuerpo, Martín
Menem, sometió a votación el temario con el cual el
bloque de la Unión Cívica Radical solicitó la sesión.
Ninguno de esos proyectos contaba con dictamen, por lo que
-previsiblemente- no se alcanzaron los dos tercios de los
presentes para tratarse sobre tablas. La votación resultó
con 131 positivos, 101 negativos y 0 abstenciones.
Posteriormente se pasó a votar la moción de pedido de
emplazamiento de las comisiones realizadas por el jefe del
radicalismo, Rodrigo
de Loredo, y el presidente de Unión por la Patria, Germán
Martínez. Por un lado, uno se refirió al
financiamiento de las universidades, y el otro al FONID,
respectivamente. Esto abrió un ida y vuelta con Menem, que
planteó que eran dos mociones distintas y por lo tanto
tenían que hacerse dos votaciones. Después de insistir, la
UCR y UP lograron que se voten en conjunto.
De esta
manera, el emplazamiento dispone que el
plenario de Educación y Presupuesto se reúna este jueves a
las 14, con “la obligación de emitir dictamen” sobre
presupuesto de las universidades nacionales; mientras que en
esa misma reunión deberán tratarse las iniciativas sobre el
FONID, para dictaminar sobre ésta cuestión el próximo martes
28 de mayo a las 15. Fue aprobado con 152 votos a
favor, 81 en contra y 0 abstenciones.
Positivamente lo hicieron los bloques de Unión por la
Patria, UCR, Hacemos Coalición Federal, Innovación Federal,
Coalición Cívica, Frente de Izquierda, Por Santa Cruz y
Movimiento Popular Neuquino.
Mientras
que rechazaron La Libertad Avanza y sus aliados del Pro, el
MID, los tucumanos de Independencia, Buenos Aires Libre y
Creo. Además votaron negativamente Ricardo
López Murphy, de Hacemos Coalición Federal -el
único de su bancada- y los sanjuaninos de Producción y
Trabajo.
La
sesión de este martes estuvo en duda hasta minutos antes; si
bien no había sido levantada por sus impulsores, los
radicales se congregaron en las oficinas de De Loredo a poco
tiempo del inicio y evaluaron qué harían luego que desde el
Gobierno nacional llegara el anuncio de que se había
acordado con el Consejo Interuniversitario Nacional un
aumento del 270% (para gastos de funcionamiento, no de
salarios) para todas las universidades, como sucedió antes
con la UBA. Un incremento que regirá para este año.
Pero
previamente, el oficialismo ya había intentado frenar la
sesión con la convocatoria al plenario de Educación y
Presupuesto para este jueves a las 16. Ahora el
emplazamiento fue para dos horas antes. Cuando este lunes la
Libertad Avanza y sus aliados del Pro movieron esa ficha ya
había incluso radicales que sugerían no ir a la sesión, por
más que era su propio espacio el que la había pedido. ¿El
argumento? No quedar “pegados al kirchnerismo”.
Unión
por la Patria ya había avisado que bajaría a dar quórum y
que además pediría por el emplazamiento para tratar los
proyectos relacionados al FONID. Así fue finalmente.
A las
14.22 se alcanzó el quórum, con la presencia holgada de 138
legisladores. A los diputados de la UCR y UP se sumaron por
la Coalición Cívica cinco de seis de sus integrantes: Juan
Manuel López, Paula Oliveto, Maximiliano Ferraro, Mónica
Frade y Marcela
Campagnoli.
También
dieron el presente los cinco legisladores del Frente de
Izquierda Myriam
Bregman, Nicolás del Caño, Romina del Plá, Alejandro Vilca y Christian
Castillo.
Por
Hacemos Coalición Federal, sólo cuatro diputados estuvieron
para el quórum -los demás, como Miguel
Pichetto, bajaron luego- y fueron: los cordobeses Ignacio
García Aresca y Oscar
Agost Carreño; y los socialistas santafesinos Mónica
Fein y Esteban
Paulón.
Además,
se sentaron en sus bancas para aportar al número Agustín
Domingo (Innovación Federal), Osvaldo
Llancafilo (Movimiento Popular Neuquino) y Sergio
Acevedo (Por Santa Cruz).
La
sesión transcurrió durante horas por otros temas: hubo más
de una veintena de cuestiones de privilegio, tres homenajes
y pedidos de apartamiento del reglamento para tratar
repudios contra el secretario de Culto, Francisco
Sánchez, lo pidió la massista Cecilia
Moreau; el intendente de La Matanza, Fernando
Espinoza, a solicitud de la macrista Silvia
Lospennato; y el presidente español, Pedro
Sánchez, a propuesta del libertario Nicolás
Mayoraz. Sin los dos tercios, ninguno prosperó.
El
oficialismo y sus aliados del Pro cuestionaron en varios
tramos la realización de la sesión, al recordar que el
plenario ya estaba citado para este jueves. Algo sobre lo
que hizo énfasis el titular de la Comisión de Educación, Alejandro
Finocchiaro, quien no ocultó su malestar por el
avance de la sesión -que calificó de “ridícula, ignominiosa,
desprolija y grave”- y responsabilizó
al jefe del bloque radical, a quien acusó de “faltar a
su palabra”, ya que según el macrista el viernes se había
acordado llevar estos temas directamente al plenario de esta
semana.
“Quién
sabe qué culpas tiene que lavar el diputado De Loredo para
habernos metido en esto”, lanzó y desafió: “Quiero, por su
intermedio señor presidente (dirigiéndose a Menem),
manifestarle al diputado De Loredo que no sólo tengo honor
para mantener mi palabra, sino que tengo coraje y hombría de
bien para mantener mis dichos”.
Al
responderle, De Loredo expresó: “Esas reuniones nocturnas a
las que usted le asigna una relevancia tan trascendente, y
además las falsea, no son a las que le damos prioridad”.
“Nosotros le damos prioridad a las reuniones de día y con la
luz prendida y la palabra en público”, retrucó el cordobés.
En su discurso, afirmó que estaban presentes “por una
cuestión de tiempo, porque el tiempo está pasando y las
soluciones no aparecen”.
Ante la
extensa previa de la votación, el líder de Hacemos Coalición
Federal, Miguel
Pichetto, se quejó: “Esta tarde nos deja una
experiencia lamentable. Esto ha sido interminable y
lamentable”. “Tienen que funcionar las comisiones y tiene
que haber trabajo de comisiones con dictámenes, porque eso
nos permite ordenar el recinto, sino como dijo el diputado (Leopoldo) Moreau,
es debate libre”, sostuvo.
“Nosotros no vamos a avalar con dos tercios el tratamiento
del financiamiento universitario. Tiene que haber dictamen
de comisión y saber con certeza lo que se va a votar”,
insistió y aclaró que desde su bloque no iban a hacer
“demagogia barata”.
Por otro
lado, en línea con un reclamo que Germán Martínez había
planteado anteriormente, Pichetto le reclamó a Menem que
“hay que armar las bicamerales presidente, porque hay
organismos del Estado que requieren control”.
Casi en
el cierre, la diputada radical Danya
Tavela, referente del ámbito universitario, lamentó
el “debate descalificador, lleno de agravios, de aprietes,
de amenazas, de códigos que se rompen”. “Hicimos un
recorrido conjunto respecto de este tema con todos los
espacios políticos que integran esta cámara, a veces con
acuerdos, a veces con diferencias, pero siempre tratando de
encontrar el equilibrio y respetándonos. Lamentablemente hoy
ese nivel de diálogo pareciese que no va a poder sostenerse
en el tiempo”, manifestó.
Además,
recordó que “las respuestas las venimos trabajando con el
sistema universitario argentino desde hace más de dos meses”
porque “hay una clara intención de este Gobierno de
desfinanciar la ciencia y la educación”.
Si bien
celebró el anuncio realizado esta mañana por el vocero
presidencial, Manuel
Adorni, la exsecretaria de Políticas Universitarias
aclaró: “Lo que no vamos a celebrar es el intento de dividir
al sistema universitario argentino, de cuestionar su
legitimidad y de finalmente poner en duda lo que significó
la marcha del 23 (de abril)”. |